Independizarse y vivir solo por vez primera es una experiencia que se vive solo una vez en la vida. Aunque el miedo, la excitación y mil pensamientos más recorran tu mente ante este viaje que empieza con la universidad, esta etapa te preparará con la capacidad de adaptación necesaria para superar cualquier obstáculo futuro.
Para hacer más fácil la transición y que te preocupes solo por tus estudios y nuevas amistades, hemos preparamos para ti una lista con 5 consejos infalibles para que vivir en una residencia estudiantil empiece como una experiencia buena e inolvidable:
1. Aprende a elegir: para ser independiente debes saber tomar decisiones y la decisión más importante que puedes tomar en el comienzo de tu vida solo es mudarte de forma consciente. Empieza buscando una residencia de estudiantes cerca de tu centro de estudios. Puedes colocar en el buscador de Internet “residencia de estudiantes Madrid” para hacerte una idea de las opciones que tienes, cómo son los medios de pago, qué servicios ofrecen y las recomendaciones del alumnado.
2. El conocimiento lo es todo: una vez que te mudes a tu nueva residencia de estudiantes, es hora de que conozcas el sitio donde pasarás una gran parte de tu tiempo por los próximos años. Tómate unos minutos para recorrer las áreas comunes, aprender sobre la política de limpieza de las habitaciones, si tienen o no servicio de lavandería y cómo funciona y el tipo de conexión a Internet que ofrece el centro residencial. Utiliza estos primeros días para analizar tu entorno y evaluar si es necesario que compres algo para el día a día, como una cafetera o una silla especial de escritorio.
3. Lee el reglamento: toda residencia de estudiantes, en Madrid o en cualquier otra ciudad, tiene un reglamento que cumplir. Es importante que leas bien las normas y reglas de convivencia para así evitar problemas a futuro con los demás. Recuerda que convivir con otros es más fácil si colaboras y cumples con tus obligaciones.
4. Haz el lugar tuyo: una vez que sepas qué tanta libertad tienes para decorar, haz del espacio que has adquirido “tu espacio”. Puedes utilizar cosas hechas por ti mismo como muebles con paletas de madera para darle un estilo diferente y acogedor a tu habitación o podrías traer algo de tu casa que te haga sentir cómodo y en tu hogar.
5. Se precavido: ten en un lugar a la vista los números contactos de tus padres o familiares para que las personas sepan a quién llamar a la hora de una emergencia. Si tomas medicamentos, eres alérgico a algo o sufres de alguna enfermedad crónica, infórmalo con antelación a los habitantes de la residencia. Recuerda que ser precavido es parte de la vida adulta.
Con esto y otras cosas que vayas aprendiendo por el camino, estarás listo para comenzar esta nueva etapa de tu vida.
Para más información sobre una residencia de estudiantes en Madrid, puedes visitar nuestro blog o leer nuestra sección de información. Cualquier duda que tengas, no te olvides de contactarnos.
¡Éxito!